3 Formas bíblicas para sanar tu cerebro de la pornografía

Los daños que causa la pornografía en el ser humano son catastróficos.

Pero al ser visto esta adicción como algo "natural", simplemente omiten lo drástico que puede ser a la salud física, emocional y mental. 

Ya a nadie le sorprende que su vecino o su compañero de clases tenga algunos vídeos subidos de tono en su celular, o que su hermano esconda sus revistas para adultos bajo el colchón. 

Hasta la misma sociedad se ha vuelto insensible a estos temas.

Basta con voltear la mirada a los lados para toparte con montones de mensajes haciendo alusión a la sensualidad y el erotismo.

Sabemos que la pornografía afecta a nuestra salud mental y emocional. 

He sido testigo del comportamiento de algunas personas adictas a la pornografía, y es por eso que puedo afirmar lo dicho anteriormente. 

Pero hay una maravillosa noticia: SE PUEDE VENCER LA ADICCIÓN A LA PORNOGRAFÍA.

Imagina tu cerebro porno-adicto como cualquier parte de tu cuerpo, si está lastimado, con el tiempo, siempre sana.

Solamente se necesita un poco de ayuda, constancia y paciencia. 

Nuestra comprensión sobre cómo funciona el cerebro va en aumento.

Ya no podemos decir que desconocemos totalmente su comportamiento, tratamientos y como este evoluciona durante el desarrollo humano. 

Es más, somos capaces de enseñarle a cambiar conductas que han sido aprendidas durante años.

Y es ahí donde quiero llevarte mediante este artículo.

A continuación, te proporcionaré 3 formas de sanar tu cerebro de la adicción a la pornografía. 

No permitas que las ideas de imposibilidad corroen tu mente. Necesitas ayuda y aquí estoy para prestártela. 

Vamos de a pocos.  Dándole a este proceso el tiempo para sanar así como sana un brazo roto.

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1.- Consigue unas muletas

Mejores son dos que uno; porque tienen mejor paga de su trabajo. Porque si cayeren, el uno levantará a su compañero; pero !!ay del solo! que cuando cayere, no habrá segundo que lo levante. (Ec. 4:9-10)

Cuando te lesionas una pierna es necesario usar muletas para poder movilizarte.

Nadie en su sano juicio evita el uso de ellas por el simple hecho de querer caminar en un solo pie. 

Del mismo modo, nadie que desee vencer su adicción a la pornografía debe hacerlo sin un apoyo.

Como ya he mencionado en artículos como: ¿Por qué no puedo alejarme por completo de la pornografía y la masturbación?

La persona que se va a enfrentar en una lucha con su adicción pornográfica, es necesario que busque la ayuda de alguien dispuesto a acompañarlo en el combate. 

Estos pueden ser un amigo, un familiar, un pastor o un líder.

Solo el simple hecho de contarle a alguien tu lucha interna, desencadenará en ti una fuerza de voluntad para salir victorioso. 

No tengas miedo de lo que te puedan decir. Lo más probable es que te sorprendan con su apoyo inmediato. 

Y al igual que las muletas, tu socio de batalla será tu ayuda cuando intentes caer, y si lo haces, podrá levantarte inmediatamente.

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2.- Sé drástico con tus medicamentos

Y él me enseñaba, y me decía: Retenga tu corazón mis razones, guarda mis mandamientos, y vivirás. (Pr. 4:4)

 El deseo de consumir pornografía puede aparecerse en ti en cualquier momento.

Camino al trabajo, a la escuela, de compras o en la cita con tu pareja.

Y si no tienes el medicamento para revertir el proceso, seguramente terminarás consumiéndola. 

Por eso es necesario hacer un cambio drástico a tu estilo de vida. 

Como quien intenta hacer una dieta para perder peso, es necesario hacer una "dieta" para controlar tus hábitos y evitar terminar con atracones de pornografía.

Toma nota de la siguiente lista de medicamentos que debes seguir al pie de la letra.

Escríbelos en papel, imprímelo y pégalo en un lugar visible donde puedas recordarlo todos los días. 

Rompe esta dieta y estarás nuevamente en donde empezaste.

• Procura dormirte temprano (dormir las 8 horas necesarias).
• Lee y memoriza un versículo bíblico todos los días.
• Hazte de una rutina de constante oración.
• Trata de comer saludable.
• Práctica alguna actividad como correr, andar en bicicleta, nadar, caminar, jugar fútbol, etc. Con la intensión de reemplazar conductas aprendidas por la adicción.
• Se más sociable que nunca. Esto implica buscar amistades reales, no en las redes sociales.
• Identifica cuales son los desencadenantes a tu consumo y evítalos.
• Disminuye gradualmente el uso de las redes sociales y aparatos electrónicos.

Toda esta lista que te he proporcionado es con la sana intensión de promover en ti un crecimiento positivo sin adicciones. 

He conocido a personas que han sido tan dedicadas a su recuperación que lo han podido lograr, y que al programar cada minuto de su vida comenzaron a adquirir nuevos hábitos diariamente.

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3.- Fortalece tu sistema inmunológico

Porque no nos ha dado Dios espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio. (2 Tim. 2:7)

En esta era que cada vez está más digitalizada, es difícil escapar del alcance de la pornografía.

Pero eso no quiere decir que debemos rendirnos ante ella.

Sino más bien usar nuestro espíritu de dominio propio (2 Tim. 1:7) para resistir cualquier ataque.

Para ello, fortalécete constantemente.

Pide la ayuda de alguna persona para establecer una protección anti porno en tu ordenador, y disminuye el uso de las redes sociales.

De ser posible, elimina cualquier red social que te esté llevando a caer en la pornografía.

Eso fue lo que hice recientemente con mi cuenta de TikTok.

La abrí con la intención de llevar un mensaje evangelístico, sin embargo, la aplicación me bombardeaba a cada momento con vídeos indecentes.

Por más que procuraba dar like y pasar tiempo en vídeos cristianos, el algoritmo de TikTok mostraba los vídeos con más intensidad.

Así que tomé la drástica decisión de eliminar mi cuenta TikTok.

Porque vale más la salvación de mi alma que la fama en redes sociales.

¿Cómo puedes hacer esto también tú? Pues admitiendo que tienes un problema con la pornografía.

Así que conoce tus debilidades, y trabaja en fortalecerlas.

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Por último

Los pasos hacia la recuperación no siempre son fáciles, pero valen la pena. 

Acostúmbrate a rodearte de personas que influyan en tu recuperación, incluso si es dentro de la iglesia. 

No te desanimes si crees que no verás resultados. Y jamás olvides que Dios está contigo para darte respaldo y sostenerte.

Y de esta manera, hemos llegado al final de este artículo. Espero haya sido de bendición y ayuda para tu vida.

Si tienes alguna pregunta u opinión, házmelo saber abajo en los comentarios. Y comparte este artículo en tus redes sociales.

Dios te guarde.🙏

¡Vuelve pronto!🤗